¿De dónde proceden los cocoteros?
Se sospecha que su origen está en la Melanesia, un grupo de islas del Pacífico al noreste de Australia. Pero ahora se puede encontrar en todas las zonas costeras de los trópicos donde, a causa de las condiciones extremas, no crece ninguna otra planta. El agua salada, los suelos arenosos, el calor extremo y las tormentas no pueden hacerle nada a los cocoteros. También destaca su forma de expansión: El agua transporta los cocos que caen en el mar y los lleva hasta alguna playa en otro lugar, donde echan raíces y crecen.
Frutos a partir del 6º año
A partir del sexto año empiezan a florecer. Por cada eje de hoja aparece una amplia inflorescencia con una longitud de 1 a 2 m. En ella hay muchas flores masculinas y femeninas que no florecen simultáneamente. Por ello, la polinización es principalmente cruzada y la realizan tanto insectos como también el viento. Tras seis meses, los cocos en desarrollo alcanzan su tamaño final y necesitan otros seis para madurar completamente. Un cocotero produce la mayoría de los cocos desde los 15 a los 60 años.
Desde el punto de vista botánico, los cocos son una fruta de hueso. Según la variedad tienen un revestimiento exterior verde, amarillo o naranja resistente al agua. Debajo hay una capa de fibra de varios centímetros de grosor que protege al fruto de los golpes. Le sigue la dura capa de hueso, bajo la cual se encuentra la pulpa que contiene el aceite, la copra. El interior del fruto está lleno de agua de coco. El coco puede llegar a pesar 2,5 kg.